Hay una cosa y solo una cosa que apasiona a muchos padres primerizos:
Dormir. Dormir es muy importante para los niños en su colchón cuna, pero
también para los padres.
Los bebés crecen y se desarrollan mucho mientras duermen y
un padre o una madre descansada es un padre o madre feliz.
Dicho esto, nunca dejes de preocuparte por como duerme tu
pequeño en su colchón cuna y por eso,
hemos intentado establecer unos hábitos de sueño seguros desde el principio, como
esta lista que te ofrecemos a continuación.
Usa una manta para envolver al bebé
Las mantas para envolver al bebé te permiten descansar más
tranquila/o sabiendo que tu bebé no puede retorcerse en el colchón cuna o accidentalmente terminar con una manta en la cara.
Envolver al bebé es una técnica ancestral, más conocida en
las sociedades orientales, que se ha vuelto a usar en los últimos años para
calmar y dar seguridad al recién nacido mientras duerme en el colchón cuna, brindándole un confort
similar al que tenía dentro del útero materno.
Consiste en ceñirle una sábana o manta con firmeza alrededor
del cuerpo, una práctica beneficiosa si el bebé la acepta, puesto que hay bebés
que no soportan estar envueltos, algo completamente entendible.
Sin embargo, es importante hacerlo con seguridad para evitar
cualquier tipo de riesgo para el recién nacido mientras duerme en el colchón cuna.
Cómo envolver a tu bebé
Debes envolver a tu hijo con cuidado y siguiendo unos
sencillos pasos para que así se mantenga relajado durante todo el proceso.
Necesitas una manta de unos 85 x 85 cm. Debe ser suave,
blanda, transpirable y preferentemente elaborada con materiales naturales. Si
es verano, puedes utilizar una sábana de algodón.
- Dobla la esquina superior de la tela hacia dentro. Coloca al bebé encima de la manta con la cabeza sobre la esquina doblada. También puedes colocar en la cabecita del bebé un cojín fino.
- Toma la esquina izquierda y pásala sobre su cuerpo, metiendo el extremo que sobresale por debajo de su brazo izquierdo, por detrás del hombro y bajo la espalda.
- Coge el extremo inferior de la manta y súbela hasta que quede debajo de la barbilla del bebé.
- Toma la esquina de la derecha y envuelve el cuerpo con esa parte, metiendo el borde por debajo de su brazo derecho y bajo la espalda.
Y, sobre todo, asegúrate de que jamás la manta cubra su
cara.
Hay muchos vídeos disponibles en Internet (buscar por "swaddle baby").
Mantén al bebé cerca
La AAP ahora recomienda que todos los padres y cuidadores
compartan habitación con sus bebés durante al menos seis meses y hasta un año
de vida.
Esto significa compartir una habitación, pero no el colchón cuna, con tu bebé.
Facilita la lactancia
Lo cierto es que el colecho facilita la lactancia materna,
especialmente durante la noche, y numerosos estudios han demostrado que la lactancia
reduce el riesgo de SMSL.
Favorecer el apego
Otra de las reivindicaciones por las que muchos bebés acaban
durmiendo con sus padres es que esto favorece el apego entre ambos.
Utiliza un ventilador
Poner un ventilador en la habitación se ha relacionado con
la reducción del riesgo de SIDS y es algo muy simple de hacer.
Un nuevo estudio vuelve a hablarnos de la muerte súbita y de
una curiosa forma de prevenirlo: utilizar un ventilador en la habitación del
bebé mientras éste duerme en el colchón
cuna para que el aire circule.
Según los resultados publicados en la revista científica
Archives of Pediatrics and Adolescent Medicine, el uso del ventilador
representó una baja del 72% del riesgo de muerte súbita de los recién nacidos
comparado con aquellos que duermen en una habitación sin ventilar.
La explicación se centra en que reinhalar dióxido de carbono
es uno de los factores que creen podría provocar la muerte del bebé, por eso,
mejorar la ventilación del cuarto contribuiría a que no volviera a respirar el
dióxido de carbono exhalado por el propio bebé.
Usar un ventilador también tiene un beneficio oculto
adicional para esas sudoraciones nocturnas posparto.
Introduce un chupete
También se ha demostrado que usar un chupete está asociado
con la reducción del riesgo de SIDS, por lo que es posible que quieras
considerar la posibilidad de presentarle uno a tu bebé una vez que hayas
establecido la alimentación.
El chupete, que nunca debe ir colgado del cuello, es un
factor de protección ante el SMSL porque favorece los micro despertares y
mantiene al bebé en alerta.
Pero también se recomienda que si está lactando se introduzca
cuando la lactancia esté bien establecida para que no interfiera con el pecho.
Optar por los pijamas livianos
Asegúrate de que tu bebé no se sobrecalienta con pijamas
livianos en el colchón cuna, como la
ropa para dormir de algodón o camisones para el verano.
Amamantar si es posible
Se ha descubierto que la lactancia materna reduce el riesgo
de SMSL hasta en un 50%, por lo que, por supuesto, si puedes, considera
amamantar a tu bebé.
Invierta en un buen monitor de video
Los monitores para bebé te permiten estar al pendiente de tu
hijo mientras duerme en el colchón cuna
sin estar vigilándolo desde la puerta de su cuarto.
Por ejemplo, podrás escuchar (e incluso ver) a tu bebé
mientras estás en otro cuarto cocinando o leyendo una revista.
Sin embargo, la AAP no recomienda que los padres confíen
rutinariamente en monitores o tecnología similar, como monitores de
respiración, para mantener seguros a sus bebés en el colchón cuna.
En cambio, la mejor manera es controlar a su pequeño y seguir
hábitos de sueño seguros.
Según los pediatras
Los pediatras españoles han elaborado una serie de
recomendaciones para crear un ambiente seguro para el que bebé duerma.
Así, el recién nacido debe dormir boca arriba; esa es la mejor postura.
Hay análisis que dicen que es peligroso que lo haga de lado
porque el neonato tiene tendencia a rodar y suele acabar boca abajo.
También hay que evitar el sobrecalentamiento y no hay que
abrigar al niño en exceso.
El colchón cuna tiene
que ser firme para que el bebé no se hunda y no son recomendables almohadas,
cojines u otros elementos de obstrucción.
Se recomienda que el bebé duerma en su propio colchón cuna y en la misma habitación
que los padres durante los seis primeros meses de vida.
- No hacer con bebés de menos de seis meses y de forma especial en menores de tres.
- No practicar con prematuros o bebés con bajo peso.
- El riesgo del colecho aumenta si los padres fuman, toman alcohol, drogas o fármacos sedantes. También con cansancio extremo (por ejemplo, después del parto)
- Nunca practicar colecho sobre superficies blandas o colchones de agua y es muy peligroso en sofás.
- No se recomienda el colecho multicompartido, con otros hermanos y los padres.
¿Cuáles son tus consejos para dormir?
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